No puede estar más claro: la personalización funciona. Porque da personalidad, tiene connotaciones positivas y ofrece un punto diferencial, los productos personalizados tienen algo que gusta y triunfa entre los consumidores. Lo vemos con las tazas publicidad, uno de los artículos que más movimiento presenta en el sector del regalo promocional y que los usuarios más valoran por utilidad, originalidad y opciones de personalización. Las grandes cadenas de cafeterías tienen integradas las tazas personalizadas en su estrategia y reservas de utensilios desde hace mucho tiempo y ya son pocos, o ninguno, los establecimientos que no tienen el logo impreso en sus tazas publicidad.
El toque de cercanía con el visitante es indudable, el recuerdo de marca está garantizado y la satisfacción del cliente es máxima cuando se viste el ritual del café con estos puntos de personalización. Se sienten cuidados y especiales, y por eso es que las tazas publicitarias de café son una apuesta sobre seguro. A esa personalización se le ha unido ahora un complemento tan sorprendente como original, y que no deja a nadie indiferente. Los dibujos personalizados sobre la espuma del café ya son parte del pasado con la llegada de lo que se ha bautizado como ‘selfieccino‘: la impresión de tu cara en el café. ¿No conoces esta moda? Pues no pierdas detalle porque aquí te lo contamos todo, todo y todo.
Lo empezamos a ver en la recta final del 2017 y ya se ha presentado este año como la tendencia en personalización de cafés. El selfieccino, o la impresión de fotografías sobre la espuma del café, le ha dado un giro de tuerca a los ya tradicionales dibujos de flores, corazones o incluso animalitos en 3D. Lo último en tendencias originales para tu café es ver tu cara dibujada sobre él. La idea se gestó en un local londinense, The Tea Terrace. Allí empezaron a servirse los capuccinos con las fotos impresas gracias a una máquina capaz de imprimir cualquier fotografía mediante una tinta comestible similar al cacao, consiguiendo ese acabado tan original. Además, incentivaron la interacción de sus clientes haciendo que tuviesen que subir sus fotos o selfies a una aplicación conectada a la máquina. El resultado, cafés con selfie, o selfieccinos, a precio de 6€ y para el deleite de los sorprendidos y satisfechos clientes. La idea voló como la espuma (y nunca mejor dicho) en redes sociales y se convirtió rápidamente en un fenómeno viral.
Más allá de la gracia que tenga para los clientes y de lo mucho que dio de sí el fenómeno del selfieccino, lo cierto es que esta nueva moda abre la puerta a dar un paso más allá en temas de branding. Y es que esta forma de impresión permite no solo trabajar con fotografías sino dibujar el logo de la propia empresa en el café. Y no solo de la cadena que lo sirve, como Starbucks, Costa Cafe o el propio bar londisense donde surgió esta idea. Imaginemos una compañía que realiza un evento para clientes o para los empleados, donde les sirve un café con el logo de la compañía dibujado en la espuma y una taza personalizada. La sorpresa está garantizada y la estrategia de marketing se ve reforzada. Un complemento perfecto para un pack ideal de branding con la taza corporativa.
Mientras modas como el selfieccino van ofreciendo nuevos apoyos a las campañas de marketing, las tazas personalizadas siguen siendo la base de la estrategia de todos aquellos que buscan lanzar su marca lejos, fidelizar a los miembros del equipo o captar nuevos clientes y usuarios para sus productos y servicios. Y nosotros seguimos al pie del camón ofreciéndote el más amplio catálogo de tazas publicidad baratas y el asesoramiento que necesitas para triunfar. ¡Contáctanos!
Comentarios recientes